El gobierno vasco aplica el copago sanitario

¿Copago sanitario o saqueo sanitario?

Ni el decreto aprobado por parte del anterior Lehendakari, Patxi Lopez,del PSE, alegando que la implantación del copago por parte del Ejecutivo de Rajoy era una vulneración de competencias. Ni el acato pero no comparto del PNV, ha evitado librarnos de la reforma sanitaria, que ya se aplica en el resto de España desde hace un año.

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Aunque no hay una resolución del Tribunal Constitucional, éste sí ha obligado al Gobierno Vasco a empezar a aplicar la reforma mientras se está a la espera de aclarar si hay o no vulneración de competencias.

Los ciudadanos vascos tendremos que asumir el encarecimiento en un 25% de los fármacos para la población en activo y un 10% para los pensionistas. (Ver recuadro)

Todo para que el gobierno vasco ahorre entre 16 y 20 millones de euros, aunque el anterior ejecutivo del PSE lo elevó a 34,2 millones, a costa de un colectivo en el que más de 250.000 jubilados, la mitad del colectivo, cobran por debajo de 1.000 euros al mes y que existen 133.271 pagas de viudedad que no llegan a los 700 euros mensuales.

«La sombra de la reforma constitucional de Zapatero y Rajoy, para anteponer el déficit a cualquier otro derecho, es larga y negra» A este copago hay que sumarle el coste de la exclusión de más de 400 medicamentos de la financiación pública, lo que supone que las personas que los precisan lo tiene que pagar íntegramente. Con lo cuál denuncian que “el repago es aberrante y supone un ahorro mínimo y porque mucha gente mayor con pensiones muy bajas dejará de medicarse por razones económicas”.

El colectivo de Pensionistas de los tres territorios, con independencia de las inclinaciones políticas, se ha unido para tratar de coordinar una respuesta conjunta a la medida, siguiendo con las concentraciones que estaban llevando a cabo hasta ahora.

La sombra de la reforma constitucional de Zapatero y Rajoy, por la que saldar el déficit público pasaba a anteponerse a cualquier otro derecho, es larga y negra. Nada está por encima de las exigencias de Washington y Berlín y su necesidad de saquear a los eslabones más débiles de la cadena imperialista para pagar su crisis.

Ni siquiera el País Vasco se libra de esta sombra, el gobierno del PNV acata y cumple, pero tranquilos, esto no es nada personal, son negocios.

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