Las SICAV aumentan su patrimonio y dejan de pagar casi 800 millones de euros en impuestos cada año

No hay crisis para los ricos

En 2014 el patrimonio de las «sociedades de inversión ca capital variable» (SICAV) aumentó un 14% hasta los 31.486 millones de euros, 3.911 millones más que en 2013, según la última estadí­stica publicada por la CNMV. También aumentó el número de estas sociedades, utilizadas por las grandes fortunas para no pagar impuestos. Al cierre de 2014 habí­a 3.228 SICAV, 193 más que en 2013, con una rentabilidad media del 7,2%.

Los tres datos reflejan lo bien que les va a las grandes fortunas del país que siguen tirando de las facilidades que les dan las leyes fiscales para seguir creando SICAV con las que evadir impuestos y tributar al 1%. La crisis, los recortes y las subidas de impuestos son para nosotros. «Los privilegios fiscales de los más ricos son nuestros recortes»

La mayor parte son propiedad de las familias oligárquicas más conocidas del país: March, Abelló, Del Pino, Fernández Somoza, Ortega, Hernández Barrera, Bhavnani, Koplowitz, Alierta, Botín, Gallardo… En cabeza Terranova, de la familia March (950 millones de euros), seguida de Morivent, de Alicia Koplowitz (491 millones) y Soandres de la familia Ortega-Inditex (397 millones).

Las SICAV son además un negocio para la banca que gestiona sus inversiones. Bankinter, Banca March, Santander, BBVA, Banco Sabadell, la Caixa, Banco Popular, Kutxabank…, se llevan sustanciosas comisiones.

Mientas, la Hacienda pública deja de cobrar millones de impuestos. Con una rentabilidad media del 7% y unos 2.660 millones de euros anuales de beneficios, Hacienda apenas ingresa 22,6 millones; frente a los 790 anuales (3.160 millones en la legislatura) que ingresaría si contribuyeran con una fiscalidad del 35% prevista en la legislación fiscal para grandes empresas.

Con casi 800 millones de euros anuales se podrían crear 65.000 empleos en una legislatura, acabar todos los copagos sanitarios o con los aproximadamente 2.000 millones de euros de recortes a la Ciencia, acumulados entre 2011 y 2013, y mantener los casi 11.500 investigadores expulsados.

Los privilegios fiscales de los más ricos son nuestros recortes.

Deja una respuesta